top of page

Cuando el -Saber-, baja la ansiedad


Si un Aladino te dijera que en el futuro vas a tener mucho éxito y abundancia, pero que primero deberás pasar hambre, ¿aliviaría tu angustia si hoy no encontras la salida?


Ó si te dice que serás feliz con una nueva pareja, una persona linda, cariñosa y honesta, y los ve viajando por el mundo felices for ever, ¿aliviaría tu angustia si estás pasando por una ruptura que te tiene muy triste?


Yo creo que sí.


Aliviaría saber que hay algo mejor del otro lado de la tristeza, que nuestra vida no se termina acá y que al final de cuentas, con la distancia entenderemos que lo que perdimos, o el camino que habíamos tomado, no era para nosotros, o que ya cumplió una etapa.


Eso lo sabemos, lo que nos cuesta aceptar es el sufrimiento por el que tenemos que pasar; la incomodidad y el esfuerzo que debemos hacer para alcanzar lo que deseamos.

Perdemos confianza en la vida, aunque repetimos frases que comprendemos, no sabemos aplicarlas. "ya va a pasar", "es lo mejor para mi", etc.


Somos impacientes


Tenemos un umbral muy bajo de tolerancia al sufrimiento.

Queremos soluciones inmediatas que alivien nuestro dolor, y andamos por la vida encorvados de pena, buscando terapias, consumimos lectura, buscamos compañía y hacemos cualquier cosa para callar nuestra mente que nos hace pensar que nunca volveremos a reír de nuevo.


Las pérdidas son muy feas y dolorosas, hay que pasarlas como uno mejor puede. Pero también es cierto que son necesarias para crecer.

No aprendemos cuando todo va bien, no podríamos saborear de la misma manera lo bueno si no pasamos por lo amargo.


Todo es un proceso, de inicios y cierres, de crecimiento y transformación.


Están las épocas de cosecha, las épocas de siembra, y las épocas de lluvia. Y cuando llueve, hay que aceptar que es la naturaleza, y que lo que estamos pasando tiene un sentido.


Todo lo que se va de nuestra vida (persona, trabajo, etc), es porque ya cumplió su misión con nosotros. Es como una bifurcación en nuestro camino, queda despedirnos, agradecer lo vivido y aprendido, y emprender nuestro viaje.

Nuevas experiencias y aprendizajes están en nuestro camino que desconocemos.

Lo que sí sabemos es que resistirnos, es mucho más doloroso que confiar en que hay un plan distinto para nosotros.


¿Conocés el cuento del Alpinista?, lo resumo.


Había un Alpinista que emprende solo su viaje hacia la cima del Aconcagua. Iba bien y estaba ya muy cerca de alcanzar su gloria cuando un viento fuerte lo hace perder el equilibrio, empieza a rodar por la montaña, hasta que zas! queda suspendido gracias a las mancuernas de seguridad que había fijado durante su escalada. No veía nada, ya era de noche y le suplica a Dios que lo salve.

Y Dios le pregunta, -¿Estás seguro?,

- Sí dijo el Alpinista, Salvame por favor!

- Entonces corta la soga que te sujeta, dijo Dios

El Alpinista se sujetó aún más fuerte, tratando de resistir.

Al día siguiente, los rescatistas lo encuentran congelado, agarrado de la soga y a tan solo 1mt del suelo.

---

Si tan solo hubiera confiado...

Si tan solo hubiera soltado..

Se habría salvado


Solo hay que confiar que la vida es sabia, que todo lo que creemos que nos “saca”, es para liberarnos, y para hacer espacio para lo que viene, sino no llega .


En Astrología, los tránsitos de los planetas transpersonales (Urano, Neptuno y Plutón) haciendo contacto en nuestra carta natal, como también los retornos de Saturno, Quirón y los Nodos, nos hablan de estos procesos dolorosos de pérdidas, liberación y transformación.

No podemos saber qué va a pasar, pero SI podemos interpretar una bifurcación en nuestro camino.

A modo de Ejemplo, cuando mi madre enfermó y para mí fue un cambio de vida abrupto porque tuve que cuidar de ella, tenía a Urano (cambio) sobre mi Luna (madre). Cuando decidí largar mi trabajo y ser independiente, lo que fue un cambio radical, tenía a Plutón (transformación) en el MC (Estructuras y Profesión) .


Todos los cambios importante en nuestra vida, están indicados en nuestra carta natal, es asombroso cómo alivia la angustia, el comprender. Como si fuera el Aladino que nos dijera que vamos a alcanzar la felicidad, y que primero debemos pagar la membrecía.


Podemos decodificar los aprendizajes que nos trae nuestra carta natal, y entenderlo.

Cuando lo entendemos, es más fácil aceptarlo.

Y cuando lo aceptamos, estamos en paz.


Milagros


 

Si estás pasando por un momento como estos y querés comprender mejor el proceso en el que estás, te invito a apuntarte en las sesiones de Astro-Counseling que son sumamente enriquecedoras. +info

bottom of page