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Lo pienso, y aún así no lo comprendo


Una defensa a la que recurrimos cuando estamos mal o nos sentimos incómodos es utilizar la mente.


Buscamos explicaciones que justifiquen nuestro malestar, racionalizando. Y esto conlleva algunos riesgos:


1- Cuando pensamos demasiado, entramos en un loop de repasar una y otra vez la situación, y quedamos atascados en un estado anímico que nos impide ser productivos


2- Creer lo que pensamos

La mente muchas veces está equivocada e interpreta mal las circunstancias (basada en factores que nos constituyen). Es un ejercicio no solo cuestionar nuestras creencias, sino domesticar la mente.

La mente es como una paracaídas, solo sirve si se abre (Einstein)

3- Racionalizar y/o tener la mente ocupada nos inhibe de sentir. Y éste es el punto al que quería llegar.


Claro que es más cómodo distraerse que hundirse en el sentimiento. Y no me mal interpretes, porque hay excepciones en donde debemos accionar para cambiar un estado anímico. Me refiero a cuando lo hacemos de manera sostenida como mecanismo para evitar tomar contacto con el dolor.


Esto se ve cuando tenemos la Luna en Aire (Géminis, Libra, Acuario), o el Sol, Ascendente y los planetas personales, o cuando el aire domina la carta.


Tampoco debemos confundir la acción de pensar con reflexionar.

Son cosas muy distintas.


La REFLEXION es analizar, cuestionar, comprender y tomar consciencia. Nos conecta con el sentimiento y es lo que hacemos en cualquier proceso terapéutico.


La pregunta que debemos hacernos, no es "por qué pasó lo que pasó", que nos lleva a excusas, justificaciones o culpas; sino "QUE SENTIMOS CON LO QUE PASO".

Estas respuestas te llevarán a comprenderte y revelar aspectos tuyos que necesitas aprender a gestionar mejor. Pueden ser inseguridades, heridas, carencias, etc.


Reflexiona en vez de pensar
Comprende en vez de justificar
Conecta en vez de evadir

Conectar con nuestras emociones no siempre es fácil, identificar qué sentimos, o alcanzar a comprender por qué nos sentimos así, es un ejercicio que requiere estar en un estado de alta consciencia de sí mismo. Por eso las conversaciones con un profesional, son convenientes para que nos guíen a través de la reflexión y para encontrar las respuestas que están dentro nuestro.


Hacer terapia conociendo tu carta natal, es la mejor manera y la más rápida para superar tus dificultades. (Si querés saber qué información dice tu carta, ingresa AQUI)


La carta natal es un libro abierto sobre tu vida y tus circunstancias, tus dificultades y tus desafíos; pero también esconde el código de tu alma, que cuando lo descifras, comprendes el sentido de tus circunstancias y toda tu historia cobra vida desde otra perspectiva.


Conocerse a uno mismo ahorra muchísimo trabajo y esfuerzo.


Te invito a una conversación gratuita de 40 minutos para que me cuentes sobre lo que te preocupa y veo si puedo ayudarte. (El botón se llevará a la página de contacto para enviarme un mensaje y apuntar un encuentro online)

Recuerda que no eres tus pensamientos! y no te demores de resolver tus molestias e inconvenientes lo antes posible, para que la vida no siga trayéndote más de las experiencias que te hacen mal.


Te animo a dejar un comentario de tu reflexión

Milagros


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